La aparición de los primeros casos de COVID-19 en Argentina empieza a ser ruido en la principal actividad económica de la Provincia de Salta, el turismo.
En lo que iba del año se registró un aumento del 6% de la actividad turística y un ingreso de $1.800 millones de pesos. Se esperaba mantener esta buena racha a partir del Plan #Voyasalta lanzado por el Ministro de Turismo y Deporte Mario Peña (h), que consistió en la compra de pasajes adelantados con descuento para el periodo mayo y junio, situación que hoy se ve muy lejana.
Municipios turísticos como Iruya cerraron sus puertas a todos los miembros que no fueran parte de la comunidad, muchos otros alertaron sobre la presencia de extranjeros a los cuales no dejaron acceder a servicios de hospedajes, y las reservas hoteleras se desplomaron frente a la pandemia. Este nuevo panorama complica el objetivo de llegar con 2 millones de turistas al 2020, objetivo planificado y esperado por todo el sector.
Del nutrido calendario turístico previsto para el 2020 hoy no quedan más que recuerdos del carnaval pasado, y en pos de asegurar la salud de nuestra provincia todas las medidas que se puedan acatar deben ser respetadas y promocionadas. Sin embargo, habrá que estar atentos a las acciones que desarrolle el Ministerio de Turismo y Deporte, para contener a los visitantes que ya se encuentran en la ciudad, y como mantendrá o colaborará con el sector turístico que se verá fuertemente afectado, con caída del empleo e ingresos. Hay que tener en cuenta que muchas familias y municipios completos se mantienen a partir de este rubro, y que este golpe, será algo complicado de revertir en los próximos meses.
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