Quien fuera secretario de Hacienda de la Municipalidad durante la gestión de Gustavo Sáenz, ha sido claramente beneficiado por la sala 1 de la Cámara Federal de Salta dado el rechazo a las apelaciones que se presentaron en contra del ex funcionario, donde es señalado como la pieza clave del millonario y desvergonzado fraude conocido como «las facturas truchas».

Las apelaciones sobre la liberación de Pablo Gauffin sobre los presuntos delitos tributarios, fueron presentados por el fiscal Amad y la representación legal de la AFIP y DGI. Tales presentaciones se basaron en el convencimiento de que sin la participación del exfuncionario municipal mencionado tales estafas que se cometieron no hubieran sido posibles.

En mayo de 2019, el juez federal Julio Bavio, fue quien resolvió dividir la investigación sobre Matías Huergo y su red de contactos que salpican a mas de uno de los «poderosos» de Salta.
Bavio dividió entonces para la Justicia Federal una parte del caso por la presunta utilización de facturas falsas para evadir impuestos nacionales, y por otro a los delitos que involucran posibles desmanejos y desfalcos con obras públicas municipales y provinciales, donde se declaró incompetente, cabe señalar que en éstas últimas acusaciones corresponderían penas mucho más gravosas de las que implica un fraude tributario.

Una vez mas el accionar de la justicia local deja mucho que desear con estas decisiones polémicas, a pesar de la existencia de pruebas, causas cajoneadas y direccionamiento de las mismas. Es evidente que Salta no está exenta de estas prácticas nocivas y somos testigos que nuestra justicia mantiene buena relación con el “poder de turno”.