La primer final entre Boca y River terminó en empate 2-2. La serie queda abierta para la vuelta el sábado 24 en el Monumental.

El clásico dejó una buena imagen para todo el mundo y regaló un espectáculo a la altura de las circunstancias, ambos equipos dejan la serie sin definir y todo indica que el sábado 24 de noviembre marcará un hito en la historia del fútbol mundial, para el fútbol argentino será un antes y un después

El inicio en la Bombonera mostró los nervios de ambos equipos que trataban de realizar cada acción con un extremo cuidado para no sufrir algún lance del rival. El millonario tuvo claras chances principalmente de pelota parada y donde el tan cuestionado Rossi salvó a Boca manteniendolo de pie, se venía River aprovechando la velocidad y el mal retroceso de la defensa Xeneixe.

A pesar de que la visita hacía mejor las cosas fue Boca quien golpeó primero ante una desatención defensiva del Millonario y fue Wanchope Ábila quien tomaba ventaja de la partida. Particularmente la alegría le duró menos de un minuto a Boca porque en una salida rápida Pratto igualaba la serie. Antes de que acabara la primera parte, Benedetto mal marcado por Borré adelantaba a Boca en el marcador.

En el complemento River cambió de esquema y estuvo más compacto, trato de neutralizar el ataque del local y con más seguridad fue por el empate. La igualdad llegaría de un centro que impactaría el defensor Izquierdoz en retroceso y así River empataba el partido. Boca terminó mejor el partido con claras situaciones donde Armani se hizo grande de nuevo.

Fue 2-2 y nada esta dicho, la vuelta en el Monumental serán los 90 minutos finales para un serie que ya esta establecida como una de las mejores del mundo y de la historia, ambos equipos se juegan demasiado en la cancha de River.